Rocas
Como usted ya sabe, las rocas forman parte de la corteza; cuando pensamos en una roca, lo primero que pasa por nuestra cabeza es su característica sólida y su fuerza, pero rara vez pensamos que para formarse, las rocas fueron sometidas a un constante cambio, durante el cual fueron destruidas y reconstituidas. ¿Sabía usted, mi querido lector, que la más antigua de las rocas tiene unos cuatro mil millones de años? ¡Apuesto que lo último que se imaginará es que ésta se encuentra en Canadá!
En uno de nuestros primero episodios, hablamos sobre las rocas parcialmente. Gracias a lo que allí aprendimos, sabemos que estos importantes componentes se han formado debido a la actividad tectónica de la tierra, en un ciclo que comenzó cuando se formó la corteza terrestre. En ese mismo episodio, también aprendimos que existen distintos tipos de rocas. ¿Usted creía que solo los minerales se clasificaban? ¡No, no, no! Recuerde que en este hermoso planeta en que vivimos, todo se clasifica; así se distinguen tres grupos de rocas: ígneas, sedimentarias y metamórficas. El que una roca pertenezca a uno u otro grupo, depende del proceso mediante el que se formó. En esa ocasión, me comprometí con usted a hablar un poco más en detalle sobre esa clasificación. Ya sabe que lo prometido es deuda, así que ¡prepárese para saber un poco más!
Rocas ígneas.-
Se forman por el calor volcánico, gracias al magma fundido del manto terrestre. Es así como el basalto (a la izquierda), es una roca cristalina de color negro que se forma por las erupciones volcánicas en la superficie terrestre, un dato curioso es que puede encontrarla en el fondo marino. Otro dato curioso del basalto, es que se utiliza habitualmente en masoterapia con piedras calientes.
Para que no se confunda, mi querido lector, las rocas ígneas se forman cuando una masa fundida se solidifica.
Algo interesante de estas rocas es que se clasifican en dos tipos: las extrusivas y las intrusivas. Las primeras se forman de lava en la superficie terrestre; y, las segundas, se originan bajo la tierra, a partir del magma.
¿Qué cuál es la diferencia entre lava y magma? ¡Esa es una excelente pregunta!
De acuerdo al National Geographic, la diferencia está en la ubicación. El magma es la roca que todavía se encuentra bajo la tierra; y cuando llega a la superficie y continúa fluyendo como un líquido se convierte en lava. Algo interesante del magma es que no es igual en todas partes, tiene una composición química diferente y, por lo tanto, propiedades diferentes. Así que si le interesa aprender un poco más sobre eso, le invito a visitar el link oculto para aumentar sus conocimientos.
Retomando lo nuestro... ya sea por lava o por magma, las rocas ígneas están compuestas por combinaciones de minerales, dentro de los que principalmente se encuentran los feldespatos y los cuarzos. Algunos ejemplos (además del que ya se colocó más arriba) serían: piedra pómez, bomba volcánica fusiforme, cabellos de pelé, obsidiana, dacita, entre otras.
Rocas sedimentarias.-
Se forman en la superficie terrestre y se caracterizan porque tienen capas; por lo general resultan gracias a la erosión causada por el agua o el viento, los que liberan y transportan partículas que forman rocas nuevas. También pueden producirse por la evaporación del agua, o incluso a consecuencia de materiales biológicos (como esqueletos de animales o restos de vegetación).
Entonces, son sedimentos depositados por el viento, agua y el hielo sobre la superficie; estos depósitos son enterrados y con el paso del tiempo dan origen a estas rocas que se caracterizan por sus capas. En la imagen que se encuentra arriba, podrá apreciar con mayor claridad eso de las "capas"; como con el paso del tiempo se va agregando una capa de sedimento por sobre otra, la roca que se forma se verá más o menos de esa manera.
Lo interesante es que, al igual que las ígneas, las rocas sedimentarias también se sub-clasifican en clásticas (formadas por fragmentos de rocas) y químicas o bioquímicas (según su composición).
Rocas metamórficas.-
Se habla de metamorfosis o cambio, esto ocurre bajo la superficie y es causado por las variaciones de temperatura y/o presión. En otras palabras, cuando las rocas de la corteza se ven sometidas al calor, presión o ambos, se transforman. Ahora bien, este fenómeno se conoce como metamorfismo, y se da en tres circunstancias diferentes.
Existe el metamorfismo de contacto, que es cuando un calor intenso y
localizado se irradia por una masa de roca ígnea, provocando una re-cristalización y redondeándola. Otro tipo de metamorfismo es el regional, este afecta zonas más amplias, con cierta profundidad y ocurre a causa de calor y presión intensos. Finalmente, está el metamorfismo dinámico que es por los movimientos de la tierra (como la actividad tectónica), lo que puede pulverizar la roca.
Tenemos varios ejemplos de rocas metamórficas, pero uno de los más conocidos es el mármol (a la derecha).
Estimado lector, eso es todo lo que puedo comentarle sobre las rocas por ahora. Ha sido un capítulo breve, pero próximamente nos volveremos a encontrar con un nuevo episodio de esta enciclopedia de la naturaleza, para discutir sobre los fósiles.
Como siempre, muchas gracias por su apoyo y lectura.
¡Nos vemos!